Islandia es uno de esos destinos que parece sacado de otro planeta. Con sus paisajes volcánicos, glaciares milenarios, cascadas espectaculares y la posibilidad de ver auroras boreales bailando en el cielo nocturno, este país nórdico ofrece una experiencia que no se parece a ninguna otra. Ocho días es el tiempo ideal para recorrer la Ring Road (carretera circular) y descubrir los principales atractivos de la isla de fuego y hielo.
Ocho días en Islandia te permiten hacer una ruta completa por la costa sur, este y norte del país, explorando desde el famoso Círculo Dorado hasta playas de arena negra, lagunas glaciares, cañones escondidos y formaciones rocosas que desafían la imaginación. Si dispones de más tiempo, te recomiendo consultar nuestro itinerario completo de Islandia en 10 días que añade exploración de las Tierras Altas y más tiempo en la península de Snæfellsnes. La aventura es constante: cada curva de la carretera revela un nuevo paisaje dramático, cada parada te conecta con la fuerza pura de la naturaleza.
Hemos diseñado este itinerario basándonos en nuestra propia experiencia recorriendo Islandia en febrero, la época perfecta para ver auroras boreales sin las multitudes del verano. La ruta está pensada para hacerse en camper o coche de alquiler, durmiendo en campings que ofrecen las comodidades necesarias después de días intensos de exploración. Cada jornada equilibra conducción, caminatas y tiempo para maravillarte ante paisajes que parecen imposibles.
Índice
- Día 1: Llegada a Reykjavík y primera noche
- Día 2: El Círculo Dorado
- Día 3: Costa sur - el día de las cascadas
- Día 4: Glaciares y lagunas del sureste
- Día 5: Explorando los fiordos del este
- Día 6: Ruta por el norte volcánico
- Día 7: La mágica península de Snæfellsnes
- Día 8: Reykjavík y Blue Lagoon
- Consejos para conducir en Islandia
- Qué llevar en tu maleta
- Planifica tu presupuesto
- Cazar auroras boreales: guía práctica
Día 1: Llegada a Reykjavík y primera noche
Tu aventura islandesa comienza en el Aeropuerto Internacional de Keflavík, ubicado a unos 50 kilómetros de Reykjavík. Si llegas por la tarde como la mayoría de vuelos desde Europa, recoge tu vehículo de alquiler (camper o coche) directamente en el aeropuerto donde todas las principales compañías tienen oficinas. Dedica tiempo a familiarizarte con el vehículo, especialmente si es una camper: ubicación de depósitos de agua, calefacción, cocina y sistemas eléctricos.
La primera noche puedes quedarte en la zona de Reykjanesbær, cerca del aeropuerto, en campings como el Reykjanesbær Campsite que ofrece instalaciones básicas para descansar después del vuelo. Si llegas con energía y el cielo está despejado, esta zona volcánica cerca del aeropuerto es perfecta para tu primera búsqueda de auroras boreales. Los lagos Reynisvatn y Hafravatn, a pocos minutos en coche, ofrecen horizontes despejados y poca contaminación lumínica.
Aunque estés cansado del viaje, salir a buscar auroras la primera noche es una buena estrategia: nunca sabes cuándo las condiciones serán óptimas durante tu viaje. Descarga apps como “Aurora Forecast” o “My Aurora Forecast” que te indican la actividad auroral en tiempo real y las previsiones. Un índice KP de 2 o superior y cielos despejados son suficientes para ver el espectáculo, especialmente en invierno cuando las noches son largas y oscuras.
Día 2: El Círculo Dorado
El segundo día está dedicado a la ruta turística más famosa de Islandia: el Círculo Dorado, un circuito de unos 300 kilómetros que concentra algunas de las maravillas naturales más impresionantes del país. Comienza temprano para evitar las multitudes de medio día, especialmente en los puntos más populares. La ventaja del invierno es que amanece tarde (alrededor de las 10:00-11:00 AM), así que no necesitas madrugar excesivamente.
Tu primera parada debe ser el Parque Nacional de Þingvellir, el único lugar en el mundo donde puedes caminar entre dos placas tectónicas (la euroasiática y la norteamericana) que se separan 2 centímetros cada año. Explora el Almannagjá, el desfiladero principal, y busca la cascada Öxarárfoss, menos visitada pero preciosa. Þingvellir también es el lugar donde se fundó el primer parlamento islandés en el año 930, convirtiéndolo en uno de los sitios más importantes históricamente del país.
Continúa hacia la cascada Bruarfoss, una joya escondida de agua color turquesa que requiere una caminata de unos 30-40 minutos pero vale absolutamente la pena - muchos turistas se la pierden. Después, visita el área geotermal de Geysir donde verás a Strokkur erupcionar cada 5-10 minutos lanzando agua hirviendo hasta 30 metros de altura. El géiser original Geysir (que dio nombre al fenómeno en todo el mundo) ya no erupciona regularmente, pero el área es fascinante.
La cascada Gullfoss es la siguiente parada imprescindible: una catarata de dos niveles que desciende 32 metros en un cañón estrecho con una fuerza impresionante. En invierno, partes de la cascada se congelan creando formaciones de hielo espectaculares mientras el agua sigue cayendo. Termina el día visitando el cráter volcánico Kerið, un cono de ceniza volcánica con un lago de color turquesa en su interior. Pasa la noche en el Selfoss Camping, una base cómoda con todas las instalaciones necesarias.
Día 3: Costa sur - el día de las cascadas
El tercer día es probablemente el más espectacular en cuanto a cascadas se refiere. La costa sur de Islandia concentra algunas de las cataratas más impresionantes del país, cada una con su carácter único. Comienza con la cascada Urriðafoss, menos conocida pero poderosa, antes de dirigirte a Seljalandsfoss, la cascada más fotogénica de Islandia donde puedes caminar por detrás del chorro de agua (lleva impermeable porque te mojarás).
No te pierdas Gljúfrabúi, escondida en un cañón estrecho a pocos minutos caminando desde Seljalandsfoss. Para llegar tienes que caminar por un pequeño arroyo (botas impermeables imprescindibles), pero encontrarás una cascada secreta en una cueva natural con mucha menos gente. La luz que se filtra desde arriba crea un efecto mágico, especialmente al mediodía.
Skógafoss es la siguiente parada obligatoria: una cortina de agua de 60 metros de altura y 25 de ancho que cae con una fuerza ensordecedora. Sube los 527 escalones hasta el mirador superior para vistas panorámicas de la costa sur, y si tienes suerte verás arcoíris dobles en días soleados gracias a la niebla constante. Cerca está Kvernufoss, otra cascada escondida donde también puedes caminar por detrás (mucho menos turistas que Seljalandsfoss).
Por la tarde, visita la lengua glaciar de Sólheimajökull donde puedes acercarte a un glaciar real y ver sus grietas azules. Continúa hasta el famoso avión estrellado de Solheimasandur (Plane Wreck) en la playa de arena negra - requiere una caminata de 40 minutos ida y vuelta pero es uno de los lugares más fotogénicos de Islandia. Termina el día en la playa de Reynisfjara con sus columnas de basalto hexagonales y los acantilados de Dyrhólaey donde anidan frailecillos en verano. Pasa la noche en algún camping en Vík, el pueblo más sureño de Islandia.
Día 4: Glaciares y lagunas del sureste
El cuarto día continúa por la costa sur adentrándose en la región de los glaciares. Comienza visitando el cañón Fjaðrárgljúfur, un desfiladero de 100 metros de profundidad y 2 kilómetros de longitud con paredes de roca cubiertas de musgo verde brillante. El sendero a lo largo del borde del cañón ofrece vistas espectaculares, pero ten cuidado con el hielo en invierno ya que los bordes pueden ser resbaladizos.
Continúa hacia la cascada Foss á Síðu, situada en una granja con vistas preciosas, antes de llegar a Skaftafell, parte del Parque Nacional Vatnajökull. Aquí debes hacer el trekking hasta Svartifoss, la “cascada negra” rodeada de columnas de basalto que parecen órganos de iglesia. La caminata dura unos 45 minutos ida y vuelta con una subida moderada, pero las vistas del glaciar Vatnajökull desde el sendero son impresionantes.
Si tienes tiempo y espíritu aventurero, busca el Mulagljufur Canyon, uno de los cañones más espectaculares y menos visitados de Islandia. Requiere una caminata más exigente pero las formaciones rocosas y cascadas escondidas son recompensa suficiente. La ubicación exacta puede ser difícil de encontrar, así que lleva mapas offline o GPS descargado.
La joya de la corona del día es la laguna glaciar Jökulsárlón, donde enormes icebergs azules y blancos se desprenden del glaciar Vatnajökull y flotan tranquilamente hacia el océano. Dedica al menos una hora observando cómo cambia la luz sobre el hielo, y definitivamente cruza la carretera hasta Diamond Beach donde los trozos de hielo varados en la arena negra parecen diamantes gigantes brillando con el sol. Pasa la noche en Höfn Camping, el camping más cercano con buenas instalaciones.
Día 5: Explorando los fiordos del este
El quinto día es el más largo en términos de conducción (alrededor de 6 horas en total) pero también uno de los más gratificantes. Los fiordos del este son la parte menos visitada de Islandia, lo que significa paisajes vírgenes, tranquilidad y una conexión más auténtica con la naturaleza islandesa. La carretera serpentea entre montañas dramáticas, fiordos profundos y pueblos pesqueros diminutos.
Comienza el día visitando la playa de Fauskasandur, una playa remota con vistas espectaculares de las montañas circundantes. Si el clima lo permite, es un lugar perfecto para un picnic tranquilo lejos de cualquier turista. Continúa hacia la cascada Hengifoss, una de las más altas de Islandia con 128 metros de altura. La caminata hasta la cascada dura aproximadamente 1 hora ida y vuelta con una subida pronunciada, pero las vistas de las capas de basalto rojo en las paredes del cañón son únicas.
La joya escondida del día es Stuðlagil Canyon, posiblemente el cañón más fotogénico de Islandia con sus perfectas columnas de basalto rodeando un río de color turquesa. Hay dos miradores: el del este requiere una caminata más larga pero ofrece vistas desde arriba, mientras que el del oeste te permite bajar hasta el nivel del río. En invierno el acceso puede ser complicado por la nieve, así que consulta las condiciones antes de ir.
Los fiordos del este ofrecen múltiples opciones de campings en pueblos pequeños como Egilsstaðir, Seyðisfjörður o Djúpivogur. Estos pueblos tienen un encanto especial con sus casas de colores y atmósfera tranquila. Esta noche es perfecta para buscar auroras boreales ya que la contaminación lumínica es prácticamente nula - simplemente sal del pueblo y mira hacia el cielo en cualquier dirección.
Día 6: Ruta por el norte volcánico
El sexto día te lleva al norte de Islandia, una región volcánica activa con paisajes lunares, lagos de cráter y la cascada más poderosa de Europa. Comienza temprano para maximizar el día ya que hay mucho que ver. Tu primera parada debe ser Dettifoss, considerada la cascada más potente de Europa con 500 metros cúbicos de agua cayendo cada segundo. El rugido es ensordecedor y la niebla alcanza cientos de metros - es naturaleza en su estado más salvaje.
A pocos minutos está Selfoss (no confundir con el pueblo del mismo nombre), otra cascada hermosa pero mucho menos visitada. La combinación de ambas cataratas en el Cañón Jökulsárgljúfur crea uno de los paisajes más dramáticos de Islandia. Continúa hacia el área geotermal de Hverir donde fumarolas, pozas de barro hirviente y el olor a azufre te recuerdan que estás en una isla volcánica activa. Los colores naranjas, amarillos y rojos del suelo contrastan con el paisaje negro y blanco circundante.
El Lago Mývatn es tu siguiente destino, famoso por sus formaciones de lava, cráteres de explosión y vida de aves. Rodea el lago parando en puntos de interés como los pseudocráteres de Skútustaðir o las formaciones de lava de Dimmuborgir (el “castillo oscuro”). Si tienes tiempo y presupuesto, los baños naturales de Mývatn Nature Baths son una alternativa menos turística y más económica al Blue Lagoon.
Por la tarde, visita Goðafoss, la “cascada de los dioses”, con su forma de herradura perfecta que le da un aspecto majestuoso. Continúa hacia el oeste hasta el cañón Kolugljúfur con sus cascadas y formaciones rocosas únicas. Termina el día buscando Hvítserkur, una formación rocosa de 15 metros en forma de dragón bebiendo agua del mar - es especialmente fotogénica al atardecer. Acampa en la península de Vatnsnes, una zona excelente para ver auroras boreales sin contaminación lumínica.
Día 7: La mágica península de Snæfellsnes
El séptimo día está dedicado a Snæfellsnes, conocida como “Islandia en miniatura” porque concentra casi todos los paisajes del país en un área pequeña: glaciares, cráteres volcánicos, playas de arena negra, formaciones rocosas dramáticas y pueblos pesqueros con encanto. Es un día intenso pero absolutamente mágico.
Comienza visitando la playa de Ytri Tunga donde viven focas que descansan en las rocas - con suerte verás docenas de ellas tomando el sol o jugando en el agua (mantén distancia respetuosa). Continúa hacia Bjarnarfoss, una cascada escondida que cae directamente desde un acantilado. El arco rocoso de Gatklettur es perfecto para fotos creativas, mientras que las formaciones de lava de Lóndrangar se elevan dramáticamente desde el paisaje volcánico circundante.
La playa de Djúpalónssandur es imprescindible con su arena negra y las “piedras de prueba de fuerza” que los pescadores antiguos usaban para demostrar su valía antes de ser contratados en barcos. El cráter Saxhóll ofrece una subida rápida (5 minutos) hasta su cima con vistas de 360 grados del campo de lava y el glaciar Snæfellsjökull. La cascada Svöðufoss, aunque pequeña, es preciosa y casi siempre está desierta.
La imagen más icónica de Snæfellsnes (y quizás de toda Islandia) es el monte Kirkjufell con la cascada Kirkjufellsfoss en primer plano. Este lugar apareció en Juego de Tronos y es uno de los más fotografiados del país - llega al atardecer para la mejor luz. Si eres fan de auroras boreales, Kirkjufell es uno de los mejores lugares del mundo para fotografiarlas con un primer plano espectacular. Termina el día visitando las cascadas gemelas Hraunfossar y Barnafoss antes de acampar en Fossatun Camping, que tiene el bonus de unas cuevas históricas para explorar.
Día 8: Reykjavík y Blue Lagoon
Tu último día en Islandia es perfecto para explorar Reykjavík con calma y relajarte en el Blue Lagoon antes del vuelo. Comienza visitando Hallgrímskirkja, la iglesia más alta de Islandia cuya arquitectura está inspirada en las columnas de basalto del país. Sube a la torre para las mejores vistas panorámicas de Reykjavík con sus tejados de colores y el océano de fondo.
Pasea por el centro visitando el Ayuntamiento junto al lago Tjörnin (lleno de patos y cisnes), la sala de conciertos Harpa con su fachada de cristal espectacular, y la escultura Sun Voyager en el paseo marítimo que representa un barco vikingo esquelético. El barrio de Grandi, antiguo puerto industrial convertido en zona moderna, ofrece restaurantes excelentes y tiendas de diseño islandés.
Las calles Laugavegur y Skólavörðustígur son perfectas para compras de última hora: busca productos de lana islandesa (lopapeysa, los suéteres tradicionales), productos de belleza con ingredientes locales como Blue Lagoon o Sóley Organics, chocolate omNom, o licor brennivín. Come en alguno de los restaurantes del centro - Bæjarins Beztu Pylsur para el famoso hot dog islandés, o Sægreifinn para sopa de langosta.
Planifica llegar al Blue Lagoon unas 3-4 horas antes de tu vuelo (está a 20 minutos del aeropuerto). Esta laguna geotermal con agua rica en sílice a 38-40°C es el lugar perfecto para relajarte después de una semana intensa de aventuras. Reserva tu entrada online con semanas de antelación porque se agotan rápidamente. Incluye una mascarilla facial de sílice y puedes quedarte todo el tiempo que quieras dentro de tu ventana horaria. Devuelve tu vehículo en el aeropuerto con suficiente antelación (al menos 2 horas antes del vuelo) y despídete de Islandia prometiendo volver - porque todos prometen volver.
Consejos para conducir en Islandia
Conducir en Islandia es una experiencia única pero requiere preparación y precauciones. Las carreteras están bien mantenidas pero las condiciones climáticas pueden cambiar radicalmente en minutos. La Ring Road (Ruta 1) que rodea la isla está asfaltada completamente, pero muchas carreteras secundarias son de grava (marcadas con F) y requieren vehículos 4x4 - algunas están cerradas en invierno completamente.
Consulta siempre road.is y safe.is antes de salir cada día para conocer las condiciones de las carreteras y el clima. En invierno son esenciales: neumáticos de invierno (incluidos en todos los alquileres), conducir despacio especialmente en curvas y puentes de un solo carril, y estar preparado para tormentas de nieve súbitas. Los vientos laterales pueden ser extremadamente fuertes - sujeta bien las puertas al abrir o el viento puede arrancarlas.
Respeta los límites de velocidad (90 km/h en carretera, 50 km/h en zonas urbanas) porque hay radares y las multas son caras. No conduzcas fuera de carreteras marcadas - es ilegal y daña el frágil ecosistema islandés que tarda décadas en recuperarse. Los cruces de ovejas son reales especialmente en verano. Llena el tanque siempre que veas una gasolinera porque las distancias entre ellas pueden ser enormes, especialmente en el este.
Qué llevar en tu maleta
Islandia requiere un equipaje específico sin importar la época del año: el clima es impredecible y “capas” es la palabra mágica. La regla local dice “si no te gusta el clima, espera cinco minutos”, así que prepárate para sol, lluvia, viento y nieve el mismo día. Una buena chaqueta impermeable y cortavientos es absolutamente imprescindible - la lluvia horizontal impulsada por vientos de 100 km/h es real.
Para invierno (octubre-abril): ropa térmica de buena calidad como capa base, varios fleeces o capas intermedias de lana, pantalones impermeables, botas de trekking impermeables con buen agarre, gorro, guantes impermeables, y bufanda. Unos crampones portátiles para las botas son útiles en senderos helados. Para verano (mayo-septiembre): las capas siguen siendo importantes pero más ligeras, y añade protección solar porque la radiación UV es fuerte.
Otros imprescindibles: bañador (para las múltiples aguas termales y piscinas públicas), toalla de microfibra, botella de agua reutilizable (el agua del grifo es la más pura del mundo), linterna frontal, powerbank, cargador de coche, mapas offline descargados (la cobertura puede ser inexistente), y botiquín básico. Si planeas fotografiar auroras: trípode, batería extra (el frío las agota rápidamente), y práctica con configuración manual de tu cámara antes del viaje.
Planifica tu presupuesto
Islandia es uno de los destinos más caros de Europa, pero con planificación inteligente puedes controlar los gastos. El alquiler de vehículo es tu mayor gasto: campers desde 100-150€ por día en temporada baja, coches 4x4 desde 80-120€ por día. Reserva con meses de antelación para mejores precios y lee bien el seguro - el básico no cubre daños por grava, ceniza volcánica o tormentas de arena que son comunes.
Los campings cuestan 15-25€ por persona por noche con instalaciones que varían desde básicas (baños, duchas) hasta completas (cocina, wifi, lavandería). En invierno muchos campings cierran, pero los que permanecen abiertos suelen tener calefacción en zonas comunes. Acampar salvaje no está permitido excepto en áreas remotas del interior con permiso del propietario.
La gasolina cuesta alrededor de 2€ por litro - calcula unos 250-300€ para toda la Ring Road dependiendo de tu vehículo. Comida en restaurantes es cara: 15-20€ por un plato principal, 7-8€ por una cerveza. Comprar en supermercados Bónus o Krónan y cocinar en tu camper reduce costos dramáticamente. Entradas a atracciones: Blue Lagoon 60-90€ (reserva anticipada obligatoria), Mývatn Nature Baths 35€, la mayoría de las atracciones naturales son gratuitas.
Cazar auroras boreales: guía práctica
Ver auroras boreales es una de las experiencias más mágicas de Islandia, pero requiere paciencia, suerte y conocimiento. Las auroras ocurren todo el año pero solo son visibles cuando está oscuro, por lo que septiembre-marzo ofrece las mejores oportunidades con noches largas. Necesitas tres condiciones simultáneas: actividad solar (índice KP), cielo despejado y oscuridad total.
Descarga apps como “Aurora Forecast” o “My Aurora Forecast” que muestran la actividad auroral en tiempo real y predicciones. Un índice KP de 2-3 es suficiente en Islandia debido a su latitud norte. Consulta también el pronóstico de nubes en vedur.is - las auroras pueden estar activas pero si hay nubes no las verás. Sal de ciudades y pueblos para evitar contaminación lumínica - incluso la luz de Reykjavík afecta.
Las mejores ubicaciones mencionadas en esta ruta: cualquier camping en áreas remotas (este de Islandia, Vatnsnes), Kirkjufell para fotos espectaculares con primer plano, lagos Reynisvatn/Hafravatn la primera noche. Ten paciencia - a veces aparecen como un resplandor verdoso débil que se intensifica gradualmente, otras veces explotan en cortinas danzantes de verde, rosa y morado que cubren todo el cielo.
Islandia en ocho días es una aventura intensa que te conecta con la naturaleza en su forma más pura y poderosa. Esta guía te ayudará a aprovechar cada día, equilibrando las atracciones imprescindibles con la flexibilidad necesaria para adaptarte al clima cambiante y descubrir tu propio ritmo. La magia de Islandia está en sus contrastes: fuego y hielo, silencio absoluto interrumpido por cascadas rugientes, días grises transformados por auroras boreales nocturnas. Cada momento en esta isla te recordará lo pequeños que somos ante las fuerzas de la naturaleza, y lo afortunados que somos de poder presenciarlas.